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Esta es la página web institucional de la Cámara de Foresto Industria de Tucumán, institución sin fines de lucro que nuclea a empresas que industrializan o comercializan madera -o artículos elaborados sobre la base de la misma-, con el fin de propender al crecimiento del sector en el marco de un profundo respeto por la ecología y el medio ambiente.

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Los fondos nacionales llegan con retraso, pero el Estado provincial apuesta al futuro de Tucumán

03 / 09 / 2013
Juan Villa, director de Flora, Fauna y Suelo, describió cómo trabajan con las leyes 26.331 y 25.080, sobre protección de bosques nativos y para bosques implantados. El futuro
Viernes 30 de Agosto de 2013. Suplemento Rural La Gaceta

En la Provincia de Tucumán están en pleno proceso de aplicación las leyes nacionales N° 26.331, y su correlación provincial N° 8.304, de Protección de Bosques Nativos, y la norma nacional N° 25.080, de Bosques Implantados, que consisten en inversiones destinadas a conservar y mantener espacios nativos, en el primer caso, y a desarrollar proyectos de forestación, en el segundo caso. LA GACETA Rural dialogó sobre estos y otros temas con el director provincial de Flora, Fauna y Suelo, ingeniero Juan Villa, en una visita a su despacho. 

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 ¿Qué están haciendo en protección de bosques nativos?

- Estamos recibiendo los fondos previstos en la Ley N° 26.331 (se compone con un porcentaje sobre las Retenciones y el 3% del Presupuesto Nacional). En 2009, el dinero llegó tarde, pero nos faltaban proyectos. Hoy, los proyectos se incrementaron un 200% sobre los fondos previstos. Significa que hoy tenemos proyectos en exceso.
 

Además, estamos terminando de entregar los fondos 2009 y 2010, que tienen un cumplimiento de entre el 50% y el 75%, respectivamente, proyectos que deben terminarse antes de fin de año.
 

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 Todos son proyectos de protección de bosques nativos.

- Sí, son proyectos destinados a la conservación y mantenimiento, y enriquecimiento de sistemas forestales. En algunos casos son proyectos de desarrollo silvopastoril, y otros, que trabajan sobre recursos madereros controlados.
 

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 ¿La Ley Nacional 26.631 está en proceso de revisión?

- Es una norma que debe ser revisada. Estamos por comenzar con ese trabajo a nivel nacional. Existen provincias donde aún no la aplicaron, lo que indica que la norma debe ser corregida.
 

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 ¿Están en desarrollo proyectos de bosques implantados?

- Debo reconocer que en Tucumán no hay un espíritu forestador. En Tucumán hay espíritu extractivo, no productivo. no existen leyes de promoción ni de control.
 

Entre 2004 y 2012, se presentaron proyectos que proponían implantar unas 6.600 ha. De ese total, se plantaron unas 3.000 ha, lo que indica que se concretó el 45%.
 

No existen límites de recursos. Trabajamos en función del interés de los forestadores.
 

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 ¿Cómo se manejan los subsidios en la implantación?

- Los subsidios son para plantación lograda, cuando los plantines están emergiendo el suelo.

Los fondos también cubren gastos en limpieza, accesos al campo, compra del plantín, etcétera. En este caso, no es obligatorio que el forestador compre los plantines al Estado que, cuando los entrega, firma un convenio con aquel, quien se compromete a pagar un precio determinado por ese plantín.
 

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 ¿Qué se está implantando?
- Se trabaja con variedades exóticas, como pinos, eucaliptos y álamos. Por ejemplo, el INTA trabaja sobre líneas nativas con ensayos de cedro, cuya producción no es consumible, por el momento. 
¿Puede mencionar algunos de los proyectos en marcha?
- En el caso de los bosques nativos, se está viendo la recuperación de algunos bosques; también, la creación de parcelas propias para restauración. Y por ejemplo, la Ley 25.080 habla de enriquecimiento, y por eso se trabaja sobre un bosque nativo de algarrobo. Existen proyectos interesantes relacionados con la algarroba y sus usos. Esto significa trabajar sobre productos forestales no madereros.
 

Está el caso de un proyecto de algarroba, en base a la Ley 26.331, que parte de la semilla y llega hasta la producción de harina, con objetivos multipropósitos: enriquecimiento, restauración y plantación para producción no maderera.
 

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 Hay mucho por hacer.
- Sí, efectivamente. Existen proyectos, pero los fondos deben ejecutarse hasta el 31 de diciembre próximo. Buscamos que el desarrollo sea lo más integral posible. Para ello, habría que trabajar sobre los proyectos más avanzados, con plantas en producción. 

Esto es muy importante para recuperar los bosques nativos. Hay que darles sustentabilidad. Hay que trabajar sobre la cantidad y la calidad de esas producciones.
 

Y en este punto, la comercialización es un aspecto importante.
 

Como conclusión, puedo decir: 1) hay que ver que el proyecto sea sustentable, desde el punto de vista económico y social y, 2) hay que apoyar a los forestadores, porque existe un verdadero interés por desarrollar la actividad forestal en Tucumán.
"Debemos comenzar con un plan forestal aplicable"

"Desde hace 10 años presido la Cámara de Foresto Industria de Tucumán (Cafituc) y, para lograr forestar como se debe en la provincia, debemos unirnos, trazar objetivos claros y sencillos, y buscar la forma de hacer de Tucumán un pequeño polo forestal para nuestras necesidades", dijo
 Carlos Max, presidente de la entidad. 

"Hace un tiempo logramos unirnos para trabajar en conjunto, pero el sueño de lograr forestar a nuestra provincia es un sueño que todavía no se logró", reconoció.
 

Explicó que hay un buen grupo, "pero todavía no logramos concretar los objetivos de forestar más, de lo poco que hoy estamos logrando". A su juicio, se debe seguir conversando con las autoridades provinciales, en busca de "una Ley de Promoción Forestal a nuestra medida, y que nos dé los beneficios necesarios para lograr forestar como corresponde". "Necesitamos un relevamiento real, para saber cuál es nuestra situación -añadió- y, de esa manera, saber cómo debemos tomar al toro por las astas y seguir algún camino que debemos trazar".
 

Lo ideal es que "logremos, en poco tiempo, por lo menos 300 ha anuales, y ese debe ser el objetivo actual de la Cámara; corto y conciso", dijo con claridad.
 

El diagnóstico debería llevar a saber cuál es el punto lábil para lograr que la forestación funcione de una vez por todas, comentó. "Los misioneros y correntinos ya tienen diagnóstico y trabajan en pequeñas superficies, y los esfuerzos por lograr un objetivo similar siempre se realizan con diversas capacitaciones".
 

La Universidad San Pablo T ya trajo técnicos que saben de estos temas, exponiendo cómo lograron tener una ley de fomento sencilla. "No dudamos de que debemos unirnos: nuestra cámara, la Medefit y la provincia, y lograr, de alguna manera rápida, algo sencillo y aplicable, y solucionar los inconvenientes que tenemos, por ejemplo, de forestar en tierras fiscales, los problemas originados por el reordenamiento territorial, con las 'zonas rojas' como ejemplo", dijo.
 

Hoy "sólo necesitamos unir todos los brazos que estamos en esta actividad", tanto públicos y privados, para empezar con "un plan forestal práctico y sencillo para lograr el objetivo final de forestar", algo todavía no logrado. "Es hora de trabajar, planificar y desarrollar un proyecto sustentable", que incentive a los tucumanos a invertir en forestación.
Diseñan un Plan Estratégico para la foresto-industria

La Mesa de la Foresto Industria de Tucumán (Medefit) integra la actividad forestal en la provincia. Viene trabajando desde hace tiempo en varios aspectos vinculados con el sector, como en un Plan Estratégico para la Foresto-Industria de Tucumán. "Queremos proponer las políticas que rijan los destinos forestales de nuestra provincia, incluyendo un listado de especies, donde el objetivo será industrializar las plantaciones. También preparamos un mapa de aptitud forestal, con especies para cada provincia, como así también un inventario de especies forestales", describió el ingeniero
 Adrián Trápani, docente de la FAZ, productor forestal e integrante de Medefit. 

"También hablamos de la promoción de especies de producción industrial (pinos y eucalipto), de la generación de biomasa para uso como energía renovable (pallets, chips), del enriquecimiento de los bosques nativos con especies de alto valor (cedro y lapacho). El objetivo es que Tucumán y el NOA se transformen en productores de maderas de alto valor", explicó. "La idea es que exista una replantación de esas especies; también impulsamos que se trabaje en las zonas marginales", agregó.
 

¿Nunca antes existió un plan de este tipo en Tucumán?, preguntó LA GACETA. "En la provincia no existe un plan de este tipo. Por eso, estamos trabajando, con el Gobierno provincial y las demás entidades forestales, el INTA, el IDEP, la Eeaoc", respondió. "Ya lo presentamos a las autoridades, y lo estamos adaptando a otras opiniones", dijo.
 

¿Cómo está el sector industrial?, consultamos. "Hay industria, pero la mayoría es muy obsoleta. Muchas constructoras compran sus materiales fuera de Tucumán. Es que en nuestra provincia falta todo esto, como para lograr una industria forestal más moderna", señaló.
 

"El tema del enriquecimiento del monte es algo nuevo. En Tucumán hay unas 100.000 ha para forestar con especies de alto valor, por ejemplo. Tenemos una amplia zona por desarrollar. Existen subsidios y beneficios nacionales y provinciales. Debemos seguir trabajando juntos, privados y el Estado, para mejorar la actividad forestal de Tucumán", indicó, para concluir: "somos optimistas; Tucumán no se transformará en provincia totalmente forestal, pero tenemos climas que permiten encarar distintos proyectos, acompañando a las otras actividades agropecuarias".
Diseñan un Plan Estratégico para la foresto-industria

La forestación en Tucumán es una alternativa válida, siempre y cuando la tomemos a largo plazo, pero actualmente existen condicionamientos que no permiten que se desarrolle en toda su magnitud, aseguró
 Jorge González Morenghi, productor forestal tucumano. 

Por otro lado, "lo primero que debemos tener en cuenta es en qué lugar estamos hoy parados", dijo, y, para ello -agregó-, "debemos realizar un profundo diagnóstico de la situación, pero con los pies en la tierra y evitar pensar en grande y no llegar a nada".
 

"¿Tucumán es realmente forestal o podrá serlo algún día?", es la pregunta de todos los que se dedican a esta actividad, explicó.
 

"Pero además, debemos tener en cuenta que el rol del Estado provincial es fundamental para lograr realizar algo forestal" en la provincia, y que "los pasos que debamos seguir para lograrlo no terminen en trámites que después no lleguen a ningún punto", añadió.
 

Actualmente, existe la Ley Nacional de Promoción Forestal (N° 25.080) y la de adhesión provincial (N° 7.021). Tienen más de 10 años y, según lo informado por la Dirección de Forestación Nacional, en promedio, Tucumán no supera las 65 hectáreas (ha) anuales de plantación certificada desde la vigencia de la ley.
 

Lo real es que "a Tucumán ingresa más del 90% de la madera que comercializa". Se la trae de otras provincias, como maderas industrializadas para su reventa, y en menor cantidad nativas para su aserrío. Igualmente postes y maderas impregnadas. "Hoy no podemos forestar nuestras propias especies nativas porque no tenemos plantines", aseveró el forestador.
 

Lo real es que "necesitamos una Ley de Promoción Forestal muy bien lubricada, y también desarrollar un polo forestal, en el cual no compitamos con tierras actualmente productivas, sino buscando aquellas tierras marginales y con dificultades productivas.
 

"Forestar para el tucumano es seguramente algo que no conoce", opinó González Morenghi, ya que "sólo se extrae lo que hay, y poco, y nada se foresta, y la promoción, que se dice que tenemos, no existe en realidad, y los trámites para lograrlo son tediosos y largos" y la mayoría de la veces no llegamos a nada, agregó. "Debemos buscar la forma que, con el Estado, logremos lubricar el sistema y producir nuestra propia madera", planteó.